En la edición de este miércoles del programa “Padre Nostro”, emitida por TV 2000, el Papa Francisco se refirió al reciente cambio en la oración del Padre Nuestro en lengua francesa, y señaló que quien induce a la tentación es Satanás y no Dios.
El 3 de diciembre entró en vigor en Francia la nueva traducción de la sexta línea del Padre Nuestro. Hasta entonces los fieles recitaban “no nos induzcas a la tentación”; sin embargo, a partir del domingo se recita “no nos dejes caer en tentación”. El anuncio lo hizo la Conferencia Episcopal Francesa el 30 de noviembre.
Durante el programa, el P. Marco Pozza, capellán de la cárcel de Padua (Italia), preguntó al Pontífice si Dios puede inducir a la tentación.
“No nos induzcas a la tentación’. Aquí hay amigos no creyentes, o también creyentes, que cada tiempo que dicen: ‘¿puede Dios inducir a la tentación?’”, preguntó el sacerdote y conductor de “Padre Nostro”.
El Papa respondió que esa “no es una buena traducción”. “También los franceses han cambiado ahora el texto con una traducción que (dice) ‘no me dejes caer en tentación”.
“Soy yo el que cae, pero no es Él que me empuja a la tentación para ver cómo he caído. Un padre no hace esto, un padre ayuda a levantarse rápido”, afirmó.
En ese sentido, el Santo Padre advirtió que “aquello que te induce a la tentación es Satanás. Es el trabajo de Satanás”.
El cambio en Francia
La frase que recitaban los fieles franceses estaba vigente desde 1966. La nueva traducción –“no nos dejes caer en tentación”– ya había sido confirmada en Roma por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos el 12 de junio de 2013 y poco a poco fue siendo introducida en algunos países francófonos como Bélgica y Benín.
A mediados de noviembre, en una conferencia de prensa en París (Francia), el presidente de la comisión episcopal de liturgia y pastoral sacramental, Mons. Guy de Kerimel, había explicado el significado de la modificación.
En esta se pide a Dios “ser liberados de la tentación que conduce al pecado y a una forma de esclavitud”, indicó.
Para ayudar a comprender el cambio, los obispos franceses han querido acompañar este pasaje con el volumen “Oración del Padre Nuestro, una mirada renovada”.
Se informó que el cambio será también utilizado en todas las celebraciones ecuménicas, como ha recomendado el Consejo de las Iglesias Cristianas en Francia.